Hablan, hablan y hablan. Cuentan cuentos que no se creen. Mienten. Ni se ríen ni se sonrojan. Engañan. Ni se avergüenzan ni se arrepienten. Acumulan amigos y favores. Sonríen y vuelven a sonreír. Enseñan cartas que luego cambian. Son trileros, pero no lo aparentan. Lo disimulan con las corbatas de seda. Las mismas que usan para ahogar a la gente.
Publicado el 31/12/2010 en HIPERBREVES
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios que contengan insultos o falten al respeto debido a cualquier persona o institución, no serán publicados.